lunes, febrero 13, 2006

TOKYO PLEASURES




¿Quién mejor que Don Federico para hacernos vibrar con sus palabras? Sean amables o sean tristes. Don Federico sabe qué palabra utilizar y en qué momento lanzártela a la cara.
Le cedo la palabra Don Federico y me callo, después de que nos susurre él no hay nada más que añadir.

NOCHE DEL AMOR INSOMNE

Noche arriba los dos con luna llena,
yo me puse a llorar y tú reías.
Tu desdén era un dios, y las quejas mías
momentos y palomas en cadena.

Noche de abajo los dos. Cristal de pena,
llorabas tú por hondas lejanías
Mi dolor era un grupo de agonías
sobre tu débil corazón de arena.

La aurora nos unió sobre la cama,
las bocas puestas sobre el chorro helado
de una sangre sin fin que se derrama.

Y el sol entró por el balcón cerrado
y el coral de la vida abrió su rama
sobre mi corazón amortajado.

(Sonetos de amor oscuro, Federico García Lorca)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola AN!
la poesía me ha parecido INCREIBLE!
Sabes si vale la pena alg´n libro de poesías de Federico?
besos

Anónimo dijo...

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